jueves, 18 de julio de 2013

Convivencia

Resulta ser que ahora convivo con mi pareja. Es raro decirlo así, pero debido a una extraña ley del cosmos no puedo decirle más "novio". No. Ahora tengo que decirle "pareja". Es interesante acoplarse a las leyes, caprichos y quereres del otro. Casi pongo orto, porque hay adaptaciones al otro que son del orto!!! Ejemplos cotidianos, míos y robados, a saber:
- Apretá el dentífrico desde atrás de todo, no del medio.
- Los vasos y cosas sucias van dentro de la pileta / bacha. No afuera en la mesada.
- Poné tapones en el bidet, la pileta y la ducha, para evitar que suba el olor a cloaca.
- Las toallas van colgadas en los ganchos que están en el baño, no en la cama, silla, banqueta, piso.
- No se puede tocar la puerta de la heladera con nada, a ver si todavía se raya.
- No tengamos una mascota.
- No puedo vivir sin una mascota.
- El termotanque eléctrico tiene que estar siempre enchufado.
- No enchufemos el termotanque eléctrico todo el tiempo. Es al pedo.
- No compremos nada, esperemos a que los amigos nos regalen cosas. (conclusión: hace 3 meses que mi tacho de basura es un balde)

Con respecto a ser ama de casa, vengo bastante bien, excepto la parte en la que tengo que barrer y lavar ropa. Lo primero lo hago mal y lo segundo lo hago a veces. Ah, la parte de planchar también va para atrás. O sea, venía bárbaro porque no tenía plancha (excusa perfecta). Pero una tía tuvo la maravillosa idea de regalarme una. Así que ahora también falló mi planchado. Ya habrá tiempo de aprender. O de latigar a la pareja para que haga todo él. Nada más pedagógico.